Navega el agua
una rama desgajada
de los árboles
donde te sientas a
mirar pasar el tiempo
desechando versos,
construyendo imaginarios
imperios.
Llega alguien que dice
que no es aquello
el océano;
le preguntas qué es
entonces
y dice que es un río.
Una flota de hormigas,
en hojas de oliva,
hunde una aceituna
y rompiendo la luz de
la luna
con las sombras transfiguradas
de sus columnas
asaltan la trilla de
la orilla.
Llega alguien,
y, antes de que hable,
te vas
por entre las sombras
de las hormigas.
29/03/2015
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