martes, 26 de octubre de 2010

¿Envidia...?

Y recorren la tierra con sus verdades
dando lecciones de no se sabe que...


Ninguneo de
imberbes mentales,
engreídos
en el sentido de su orbita
de giros falsos sobre
los pies de barro de los ídolos
que carcomen con arcilla
los principios de la verdad,
empapados
con la acidez de sus bilis,
por no saber ser...
Por no saber admitir...
Por no saber reconocer
más que su propia ignorancia...
Ignorancia que quiso
-quiere-
parar el mundo,
esa que siempre quiso seguir
en sus miserias, en vez
de abrir las ventanas al aire fresco...
Ignorancia que se acostó
entre sus propias inmundicias
respirando grata
la putrefacción de la envidia...

20/10/2010

Elucubrar

Elucubrar,
sale sin esperar,
se va amontonando cual leños,
en orden y en desorden,
rozando las desazones...

Maderas sin devastar
esperan, la caricia de las llamas,
pacientes y abandonadas
en los patios o en las leñeras...

Así va quedando el elucubrar,
abandonado al albedrio
de las locuras del sin sentido,
que nos acucian la vida
buscándole el sentido...
Elucubrando sin sentidos...


20/10/2010

La aspiradora

El aspirador paso rozando la coronilla
allá iba ella en bermudas,
socarrona carcajada retumbo la villa
y el aspirador no se detenía...
Era la bruja de la esquina
de negro siempre vestida,
minúscula falda alardeando sus piernas,
hermosas piernas que el mirar atraían...

El aspirador en el pelo se anclo
y no dejo ni rastro de sensatez,
aspirando el cerebro embelesado
que se perdió, siguiendo las piernas,
entre los pliegues de la falda
de la hermosa hada
de los ojos de gata enamorada
que se torno bruja malvada...

Lloraban los duendes en los macizos
de flores, al paso negro de la comitiva
tras el coche fúnebre,
gritaban silenciosas las lagrimas,
los fantasmas respetuosos se guardaban
y en la esquina la bruja del aspirador sonreía
escuchando a un vecino que, del difunto, decía:
"Se salto los sesos y la cristalera mancho..."

21/10/2010