viernes, 17 de junio de 2011

La prepotencia

¡Ay la prepotencia!

Lo que en los maestros es arte

en los demás es desastre.

Arrastrarse es dislate

acomodarse que gran arte…



¡Ay la prepotencia!

De los orates

que cargan estresantes

con sus argucias de parlantes

charlatanes en la feria de la vanidad…



¡Ay la prepotencia!

Que es coma

cuando yo quiero punto.

Que es punto

cuando me apetece punto y coma…



¡Ay la prepotencia!

Que solo ve el vestido,

se olvida del contenido,

hasta del alma del atrevido

a exponer sencillo su sentido.



¡Ay la prepotencia!

Que me estresa

con antiguas recetas…

No sabe que es de estetas

ser humilde en estás recetas.



¡Ay la prepotencia!

Que recorre está vida

escondiendo sus miserias

en el dar lecciones que sobran

y más cuando no son pedidas.



¡Ay la prepotencia!

Que sólo ve en los demás

los defectos que ella esconde,

en el gritar más,

en el no saber sus limites aceptar…



¡Ay la prepotencia!

Que aplausos recibe

de los prepotentes

que creen ser gentes

cuando sólo coro estridente.


Ángel Saguar
11/12/2010
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