sábado, 2 de septiembre de 2017

Trece sonetos V

V

Destelló en el cabo, la luz del faro 
en la costa que guardaba la playa
dorada para acoger tus pies de hada
y las huellas que las olas robaban

para las sirenas que las mecían 
con el soplo de su aliento salino,
desaliñando tus bellos cabellos,
tu cara besaba y mis labios tu alma.

Castillos de arena hacían los niños,
por ellos paseabas de mi mano
el amor que en tu mirada brillaba.

Y al crepúsculo subia la marea 
y la espuma nos llevaba a las dunas
y nos arropaba en su arena fina.

MASL