Dovelas curvas elevan y fuerzan
sostener esperanzas en los muros,
eludiendo caer en extramuros.
Cobijan bajo ellas de los que atezan
con las palabras secas de los duros
venir de la vida que a veces rezan
con salmos inaudibles que enderezan
las caídas de los ánimos puros.
Encandilan las vidrieras las luces
que con el roce de los vientos chascan
los cristales opacos de los cruces
que fragmentan los caminos y atascan
la lucidez de los derroches dulces
de piedad que se atavía de astracan.
26/03/2011