martes, 30 de noviembre de 2010

¡Pagareis el orujo!

Por loco lo tienen
exageración de tormentas
borrachera de sal.

¿Calamares gigantes?

Ajájaja...

¡Quita ya!
¿Y será verdad?

Ajájaja...

¡No bebas más Sebastián!

¡Por mi vida, os lo juro!

Dos metros de molusco
pasmado me dejaron
en el banco mediano
esta mañana temprano.

Ajájaja...

¡Deja el orujo Sebastián!
Que te perderá.

Ajájaja...

¡Maldita sea mi estampa!

Esas risas os hare tragar
comiendo el calamar.

¡Por mis hijos!

Os lo guiso.

¡Pagareis el orujo!

30/10/2010

Me ire en silencio...

Fría y gris está la mañana
camino la acera de la avenida
las luces encendidas me miran
me arrebujo en el cuello del gabán,
continuo mi soledad
naciendo versos...

Los pasos parecen presos
¿Cuánto costara esto?
Encerrar los sueños en el cesto,
recoger los restos
y calmar el gesto...

Es el destino
caminar mi soledad
sin torcer el gesto...

Vuelan los versos
sin parar, obsesos,
y en el berrocal
me iré en silencio
mientras os gritan mis versos.

Lágrimas no quiero,
que daros yo puedo...
Os las dí y nada os pedí,
que nada quise,
que nada quiero...
Intentar vivir es lo que hice.

Y en esta
mi esquina sentado,
en las cristaleras
el reflejo de un pellejo,
no más, eso veo...

30/11/2010