martes, 30 de noviembre de 2010

Me ire en silencio...

Fría y gris está la mañana
camino la acera de la avenida
las luces encendidas me miran
me arrebujo en el cuello del gabán,
continuo mi soledad
naciendo versos...

Los pasos parecen presos
¿Cuánto costara esto?
Encerrar los sueños en el cesto,
recoger los restos
y calmar el gesto...

Es el destino
caminar mi soledad
sin torcer el gesto...

Vuelan los versos
sin parar, obsesos,
y en el berrocal
me iré en silencio
mientras os gritan mis versos.

Lágrimas no quiero,
que daros yo puedo...
Os las dí y nada os pedí,
que nada quise,
que nada quiero...
Intentar vivir es lo que hice.

Y en esta
mi esquina sentado,
en las cristaleras
el reflejo de un pellejo,
no más, eso veo...

30/11/2010

1 comentario:

  1. Hay ocasiones en las que no vemos por no saber ver...o por no querer..Dicen que si se mira fijamente nuestro reflejo en un cristal...se puede ver la sombra de quien siempre nos acompaña...

    Un saludo
    Elizabetta

    ResponderEliminar