Fácil
es dejarse llevar por la corriente.
Difícil
es nadar contra corriente.
Sentencias milenarias,
tanta historia desde la prehistoria.
¿Qué nos lleva a seguir la corriente?
¿Qué nos lleva a nadar contra corriente?
Yo,
ni me dejo llevar,
ni nado en contra,
sigo la senda que señalan mi esencias.
No se si es buena o es mala,
quizás sólo sea regular,
pero
es el camino que marcan mis neuronas
y el que me permite dormir a pierna suelta.
23/05/2011
Ole, ole y ole!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarEse es mi niño cuando es clarito, ajajajajaj
Muakisssssssssssssssssss
Sabio consejo. Me ha gustado mucho. Besos
ResponderEliminarMarivy