En la mesa el periódico
doblado y atrasado,
noticias de ayer
que perdieron el interés.
En la ventana
la luz gris de un día gris
que se olvido de mí.
El teléfono callado.
Silencio de domingo,
el café se quedo frío.
Un cigarrillo,
el humo sube contenido,
aparece un sin sentido
que rima con destino:
“Si atino
el destino
¿Será camino
sin espino?
No sigo,
en el sillón dormito
conmigo mismo.
19/04/2011
Cuando el tiempo pasa de forma inexorable y nuestra sensación es esa, debemos de buscar alternativas. Pero, me imagino que no será alusivo.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, Ángel.
Que pases un Buena Semana !!!
Gracias Quino, simple metáfora, nada más.
ResponderEliminarYo por suerte o por desgracia, que nunca se sabe, nunca me aburro.
Un abrazo
Felices vacaciones
¡Y sigue insistiendo!
ResponderEliminarSe hace lo que se puede por supuesto, aunque mejor "perder el tiempo" suele ser más productivo o al menos más gratificante.
Perder el tiempo
mirando
en la calma de la tarde
como vuelan los vencejos...
Un abrazo Elizabetta.